Una sí, la otra no

Este fin de semana he visto dos pelis. Una, Los crímenes de Oxford, la otra, Sweeney Todd: The Demon Barber of Fleet Street. Una me ha gustado, la otra no. Una me costó 7,20 Euros, la otra no. Una empieza cuando descubren a una anciana asesinada en el comedor de su casa en las afueras de Oxford.
Su cuerpo lo descubren dos hombres que se encuentran por primera vez: Arthur Seldom, prestigioso profesor de lógica y Martin, un estudiante americano que acaba de llegar a la universidad con la intención de que el prestigioso profesor dirija su tesis doctoral; la otra cuando Benjamin Barker, Sweeney Todd, consigue regresar a Londres después de haber sido encarcelado injustamente durante 15 años con el objetivo de vengar-se de lo que le han hecho, centrando su ira en el juez Turpin.

Los Crímenes de Oxford es la que me ha gustado. La historia está bien y el ritmo con que se explica también. El final es posiblemente demasiado previsible pero tampoco importa. No creo que la intención de de la Iglesia fuera sorprender con el final. Vale, no sorprende pero la explicación que lo acompaña quizás sí. El problema que le veo es que los personajes son creíbles pero no los actores que los interpretan. Al profesor le falta contundencia. A Leonor le sobra contradicción. Pero sobretodo el que no me encaja en su papel es Elijah Wood. No consigue que me lo crea en ninguna escena. Que alguien me explique el ‘momento de pasión espaguetil’ con Watling. Totalmente prescindible. La mejor la hija de la anciana.

Si los crímenes es la que me gustó, Sweeney Todd es la que no. Aburridisisísima. Lo único destacable, su estética. Pero a eso ya nos tiene acostumbrados Burton. La iluminación. El vestuario. La ambientación. Los decorados. Excelentes. El resto, nada. Depp y Bonham-Carter cantan bien pero esto no tiene ningún mérito en un musical. Al final ni la historia que es interesante brilla. Aunque estoy segura que la taquilla dirá lo contrario. Y muchos llenarán blogs con lo espectacular que les ha parecido. Sólo recordarles que hace unos cuantos años, más de los que soy consciente seguro, se pudo ver un montaje que hicieron de Sweeney Todd en el Teatro Poliorama de Barcelona. Protagonistas: Constantino Romero y Vicky Peña. Eso si fue soberbio. Espectáculo puro.